Experimentando en nuevos campos

Esta mañana he sido seleccionada para una tarea que en estas fechas se vé muy socorrida.
Sí! Me han cogido de librera!

Es la librería de mis suegros, que para ayudarles otr@, pues aquí estoy yo que no tengo nada que hacer y les viene genial. 




La verdad que ya había echado algunos ratos allí, pero para hacer cosas mínimas, como poner precios, arreglar las bolsas de libros para clasificarlas y llevar cosas de un lado para otro.
Pero esta mañana he tenido que estar de cara al público.

De repente de he sentido como cuando empecé las prácticas, nerviosa, emocionada, algo temblorosa (madre mía no podía ni aguantar el boli...).
- ¿Qué colegio?
- ¿Qué curso?
- ¿A nombre de quién está?

Las bolsas están clasificadas por colores y números, por lo que es jodido relativamente fácil encontrarla en un mar de bolsas espachurradas por todos lados.

- ¿Tienes bonolibro? (Pedazo invento el bonolibro. Este año viene en versión 2.0 mejorado).

Y ahora, a sacar la factura concreta, porque también hay que tener cuidado con eso, que en el archivador están clasificadas, pero te puedes liar en un plis.

Seguidamente, hacer la cuenta (eso es lo que peor llevo, me he equivocado en el primer cliente, y ya no se han fiado de mí y no me han dejado más :-( ).

En fin, he estado 3 horicas allí. Lo que más me preocupaba era todo el tiempo que la gente debía estar allí haciendo cola, 'probeticos', y encima se van cargados como burros, pero a cambio se llevan una buena rebaja gracias al bonolibro!

Lo más seguro esta tarde vuelva, pues seguro que no me quedaré con los brazos cruzados.