lunes, 26 de abril de 2010

Entre sueños y ansiedad

A lo mejor desde fuera no se nota mucho. A lo mejor estoy exagerando. A lo mejor lo digo en casa y se ríen, o se enfadan, o vete tu a saber qué; pero lo cierto es que a cada día que pasa, estoy deseando más salir de aquí, tener trabajo, tener dinero, independizarme, ir a mi bola, no tener que dar explicaciones a nadie... en fin... lo que todo el mundo sueña, ¿no?

Esta tarde me encuentro peor, la ansiedad se ha apoderado de mí, noto como una opresión en el pecho, una angustia, un temblor, una impotencia, unas ganas de llorar... no sé qué hacer, no puedo hacer nada, sólo me queda esperar (y mientras tanto, aguantarme y estudiar).

Mi madre me lo critica todo, ahora me tiene más controlada que cuando era una criaja. Me llama más que antes, y lo rechista todo. Mi hermano ya no hace ni puto caso, se ha vuelto un rebelde y hace lo que le sale del capullo sin importarle nada. Mi padre ahora también hace unas cosas muy raras, también hace lo que le da la gana sin contar con nadie, y lo peor es que se ha vuelto un conductor bastante agresivo. lo que nos preocupa bastante.

A veces pienso que donde más agusto estoy es en las prácticas, allí no me voy a encontrar a nadie de mi entorno, a excepción de la remota posibilidad de encontrarme con alguno de mis tíos o mis primas de allí, y el día que seguro vendrán mis abuelos a su revisión al centro de salud. Mi abuela también me presiona para que vaya a comer a su casa, y la verdad es que me siento mal por no ir, pero no quiero estar todos los días allí, no quiero ir porque me sienta obligada, quiero ir porque sí, pero así no.

A pesar de todo, tengo unos sentimientos muy contradictorios, en el fondo sé que mi madre también necesita ayuda con la casa, pero también están mi padre y mi hermano. Si no hacen nada es porque a ella no le ha dado la gana de educarles, porque claro, es que yo soy la mujer de la casa... Luego dice que son unos machistas, cuando la primera machista es ella. Pero claro, es que a ella la han educado así...

Luego les hablo de lo que hacen en la casa de mi novio y me lo echan en cara, porque allí las cosas son muy diferentes, y por lo menos desde donde lo veo yo todos viven por lo menos, algo más relajados, por lo menos no son esclavos de su casa.


Ahora mismo me he quedado sola en casa, pero no estoy para nada agusto, no sé que tienen últimamente estas paredes que no me encuentro bien...








Me estoy acordando de la última vez que recuerdo que me sentí así, y la razón no tiene ni punto de comparación. Fue el día después de que alguien me dijera que no. Que no sentía lo mismo por mí. Ese día lloré. Mucho. Pero me descargué. Ese día mis padres se fueron a comer a casa de mis abuelos y conseguí que se marcharan sin mí, porque de verdad necesitaba estar sola y llorar.


Ojalá dentro de un tiempo vea todo esto como veo aquello ahora; lejano.

2 comentarios:

  1. Hoy lo ves todo negro. Pero paciencia, que para este verano ya acabas la carrera, te pones a trabajar y cuando te apetezca te independizas.
    Yo confieso que no puedo vivir con mi familia, me gusta mi casa, mi soledad y con los años me voy reafirmando más.
    Un beso

    ResponderEliminar
  2. Cariño, no estés triste... ya veras como todo va a mejor.
    Las cosas pueden parecerte mal pero ya veras como de aquí a unos días lo ves todo mejor.
    Cuídate mucho mi vida, relájate y ya veras como todo va mejorando poco a poco.

    Te amo Verónica.

    ResponderEliminar

Aquí podéis decirme lo que queráis.
Si no tenéis cuenta de google, poned anónimo en el perfil y firmad con vuestro nombre.
Me gustaría saber quien visita mi blog y lo que piensa.
Gracias por participar ^^